martes, 13 de enero de 2015

ASI O MAS PUTA

AFORTUNADO VENDEDOR

Esta historia sucedió cuando un dia mi esposo salio fuera de la ciudad a trabajar   y le  gusta que me exhiba como puta
Fui de compras y decidí, por jugar sobre seguro, ir a una
tienda en la que no suele haber mucha gente y el dependiente es jovencito. Entré
y, como una señal del destino, la tienda estaba vacía. La tienda es un sótano,
por lo que no se ve nada desde la calle e ideal para mi plan.
Le dije hola y empecé a mirar la ropa que tenían. El se
acercó y me preguntó si podía ayudarme. Yo le dije que estaba buscando algo
provocativo para una cita con un chico muy guapo al que quería impresionar. Se
le encendió la cara con una sonrisa y se fue a buscar lo más provocativo que
tenía en la tienda. Volvió con un montón de ropa que me enseñó para que yo
escogiera. Me quedé con dos minis, dos vestidos y dos camisetas. Decidí empezar
por los vestidos.
El primero era de espalda descubierta, con escote cruzado y
bastante flojo. Me lo puse, pero sin quitarme el sujetador para ver si el me lo
decía y daba juego para lo que yo quería. Salí y efectivamente, me dijo que me
quedaba bien pero que tenía que buscar un sujetador sin tira por detrás, que si
quería me traía uno. Yo le dije que si era demasiado llevarlo sin sujetador y me
respondió que dependía de adonde fuese. Pensé un poco la jugada y decidí que
esperaría un poco más antes de montar mi número. Y entré para probar el otro
vestido.

El siguiente vestido era ajustadísimo, negro y muy corto. Me
marcaba todo de una manera exagerada pero no servía para mis intenciones por lo
que seguí con la demás ropa.
Fui  por los conjuntos de mini y camiseta. Ninguna tenía
cremallera por lo que me lo probé rápidamente y al final le dije que me probaría
el primer vestido de nuevo. El no dejaba de mirarme sin perder detalle.
Me probé de nuevo el primer vestido que era el perfecto para
lo que yo pretendía. Salí y me miraba al espejo como dudando. El me decía que me
sentaba muy bien y le dije que iba a quitarme el sujetador para ver el efecto y
si tenía sujeción para el pecho(que parecía a todas luces no tenerla). Entré de
nuevo en el probador  y salí sin el. El escote era normal a simple vista
pero cualquier movimiento que hicieras lo hacía más y más provocativo. Entonces
le dije que me observara y me dijera si se veía de más, empezando ya la fase de
exhibicionismo puro. Vi como su cara se alegraba y empecé a inclinarme hacia
abajo, a moverme bruscamente y todo lo que se me ocurría. El no quitaba el ojo y yo
veía en el espejo que se me veía bastante pecho, sobre todo al agacharme,
incluso casi se me llega a salir una teta. Pasé luego al momento clave y
decisivo porque aun no estaba segura de si me exhibiría solo o haría algo más,
pero la verdad es que me estaba calentando mucho.
Le pregunté si podría recogerse algo por el pecho para que
sujetara más. Él se acerca, me pide permiso y empieza a tirar del vestido por
los lados intentando cogerlo con alfileres. Yo ya sabía que no había manera pero
le dejé hacer y el estuvo como un minuto viéndome la tetas a placer. Al tirar de
los tirantes y moverlo, aprovechaba para levantarlo lo máximo posible. Me dijo
que no, entonces le dije que iba a probarme el vestido ajustado mejor. Me cambié
y salí.
Era increible porque seguía sin entrar nadie. Me miré y
remiré en el espejo y le pregunté si se notaba la tanga ya que era muy ajustado
.El me miró el culo y me dijo que un poco la cinta de arriba pero que había que
fijarse mucho. Y yo le pregunté que donde porque yo no la veía. El se acercó y
la recorrió con su mano, acariciando de paso la parte superior del culo. le
comenté entonces que tenía un tacto muy agradable mientras me acariciaba una
nalga, para ver si sería atrevido. Y lo fue porque apoyó su mano en la cadera
pero la movió pasándola por el culo, con disimulo pero aprovechando muy bien el
momento. Decidí acabar ya pero sin comprar nada porque no me acababa de
convencer ninguno. Me metí en el probador y cerré la puerta un poco fuerte para
que rebotara y quedara semi abierta, pensando en mi última jugada. Me quité el
vestido y le pregunté por la hora que era. El me contestó pero le dije que no lo
oía y entonces se acercó  y vi por el espejo como se quedaba paralizado al
verme solo con el tanga puesto, sus ojos no quitaban la vista de mis tetas
mientras repetía la hora que era.

Luego salí y me fui. Algún día volveré y le daré algo más que
exhibicionismo que por supuesto que si…

ASI O MAS PUTA



























1 comentario:

  1. Que bella hembra ademas cachondisima como una verdadera zorra capaz de mantener quieta a una jauria en brama
    Att trendemedianoche69@gmail.com

    ResponderEliminar

Me incorporo y le sonrío metiéndome el pecho dentro del escote y bajándome el vestido que se me había subido. El vestido es sencillo pero elegante, me gusta. Al quitármelo me doy la vuelta de manera que mientras mi rostro está cubierto por el vestido mis senos, mi panocha se encuentren frente a el.