viernes, 20 de marzo de 2015

Puteando en ausencia de mi marido


Hace unos años mi marido viajo a monterrey  por temas de trabajo estuve casi 4 meses sola , mi amiga Alejandra me invito a una reunión en su casa y de casualidad me encontré con un amigo de mi marido se llama Juan quien gratamente sorprendido estuvo conmigo durante toda la velada hasta altas de la noche Juan siempre me había enamorado muy sutilmente pero nunca le hice caso hasta aquella madrugada en que las cervezas se me subieron a la cabeza y la tanga se me bajo fuimos a un hotel y tuvimos una revolcada maravillosa donde disfrute al máximo de su cuerpo y de su tremenda verga que me  atravesó por todos los huecos de mi cuerpo que se retorcía de placer entre las sabanas mientras mis senos eran manoseados y mi culo penetrado una y otra vez su verga era enorme, cansados de tanto placer regrese a mi casa de día, después de confesarme que siempre me había deseado desde que me conoció me dijo que le gustaba mi hermosa piel blanca y mis delgadas pero bien formadas piernas que se las puse al hombro cuantas veces me lo pidió, después de ese día repetimos la experiencia como 5 sábados hasta amanecernos, ya hace tiempo que no veo a juan por que por motivos de trabajo radica en otro estado , pero el recuerdo de lo gozado me excita mucho y me gustaría repetirlo alguna vez. 
Que cojan rico el fin de semana.
besos bye.



















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Me incorporo y le sonrío metiéndome el pecho dentro del escote y bajándome el vestido que se me había subido. El vestido es sencillo pero elegante, me gusta. Al quitármelo me doy la vuelta de manera que mientras mi rostro está cubierto por el vestido mis senos, mi panocha se encuentren frente a el.